En 1990 Luis Landero sorprendió al mundo de las letras españolas con su primera novela, Juegos de la edad tardía (Andanzas 102 y Fábula 2), que no sólo recibió un año después de su publicación el Premio Nacional y de la Crítica, sino que fue acogida con entusiasmo por un público que no ha cesado de crecer. Casi diez años la separan de El mágico aprendiz, su tercera novela. Para nosotros es un privilegio haber podido acompañar hasta hoy su excepcional trayectoria literaria. Con El mágico aprendiz, Landero abandona la provincia y nos sitúa en el corazón mismo de la capital durante los prometedores años ochenta en que todos los sueños de abundancia y riqueza parecían posibles. Nos introduce asimismo con un humor sabio y corrosivo en el espacio casi virtual que media, en el llamado «mundo moderno», entre los deseos y la realidad. El mágico aprendiz cuenta la historia de Matías Moro, un hombre que lleva una vida sosegada y feliz y al que un suceso fortuito le hace descubrir el amor y acaba lanzándolo, junto con sus compañeros de trabajo y un grupo de marginados sociales, a una aventura impar, donde se verá forzado a convertirse en el héroe que nunca quiso ser. Elegido así por los demás como el líder que habrá de guiarlos hacia un futuro que dé sentido y plenitud a sus vidas, arrastrará a los otros, y será a su vez arrastrado por ellos, a un viaje insólito a través del mundo de las finanzas, del éxito, del poder, del amor, del espejismo de una segunda juventud. Una aventura que acaso les permitirá alzarse de siervos a señores, de secundarios a protagonistas, y emancipar de paso a algunos desheredados de este mundo, y que finalmente les llevará a aprender de nuevo el siempre misterioso oficio de vivir.